Cómo prevenir el resfriado en los bebes

Con el frío y de hecho si el bebé ya va a la guardería aunque tenga pocos meses, es normal que los virus les afecten y que hagan que acaben teniendo resfriados con cierta facilidad, ya que las defensas de su sistema inmunológico son todavía pocas y de hecho puede que si no tratamos bién el resfriado en cuestión acabe derivando en algo más grave.
Aunque no tenemos que alarmarnos si vemos que nuestro bebé tiene moquitos o presenta un poco de fiebre, sí que deberémos controlarlo con el pediatra ya que no es raro el que de un resfriado pasen a otros males como una otitis o una infección de garganta.
Es bueno además que estén bién alimentados y sobretodo que tengan al día su carnet de vacunación.

Aunque no podemos tener a los bebés dentro de una jaula y de este modo prevenir el resfriado, lo cierto es que sí que podemos evitar o al menos no facilitar el que el virus llegue a nuestro pequeño o pequeña.
Por ejemplo si estamos resfriados es mejor que nos apartemos del bebé cuanto tosamos o estornudemos, de la misma manera que si van a la guardería y tienen algunos compañeros resfriados, optemos por dejarlos en casa.
Por otro lado, los mocos es uno de los primeros síntomas de que el bebé está resfriado. Asegurate siempre de sonarle bién los moquitos para que no se acumulen o no generen más y sobretodo es bueno que los abrigues.
Es mejor que en el invierno los bañes un día sí y un día no y sobretodo que los seques muy bién y rápidamente, evitando además las corrientes de aire.
También procura que sobretodo la cabeza, con un gorro, y los pies, con calcetines, estén tapados y así evitaremos que cojan frío.
El bebé suele meterse las manos en la boca, por lo que si toca juguetes o nuestra ropa o lo que sea es bueno procurar una higiene constante ya que puede que los virus vayan a su boca.
Además la casa debe estar bien ventilada de manera que los virus no permanezcan. Así es bueno que abras las ventanas por las mañanas y ventiles todas las habitaciones durante unos minutos.