En el artículo de hoy veremos qué es la anemia, cuáles son los síntomas en los bebés y cómo podemos prevenirla.
¿Qué es la anemia?
Tenemos que entender la anemia como la consecuencia posterior de una deficiencia de hierro, de aquí radica la importancia de la prevención.
En términos médicos, la anemia es la disminución de los hematíes (glóbulos rojos) y/o la hemoglobina puede estar también en valores por debajo de lo normal.
Una vez que nace el bebé, éste cuenta con una reserva de hierro aportada por la madre durante las últimas semanas de gestación. Estas reservas suelen durar un período de 4 a 5 meses como máximo. Después el bebé necesitara aportar el hierro del exterior, es decir adquirirlo a través de la alimentación.
La anemia más frecuente en los bebés es la ferropénica y aparece entre los 6 meses y los dos años de vida. Puede deberse a problemas de alimentación, dietas con escaso contenido en hierro o una mala absorción intestinal, ya que el hierro es un mineral de difícil adsorción y el intestino del bebé aún no está desarrollado plenamente.
Síntomas de la anemia en bebés
Una de las maneras en las que podemos notar que el bebé tiene déficit de hierro es la palidez de la piel y de los labios que además puede estar asociada a la falta de apetito.
Las consecuencias de la falta de hierro en el desarrollo pueden relacionarse posteriormente con alteraciones del desarrollo psicomotor, irritabilidad, trastornos del comportamiento, problemas de concentración y de aprendizaje, etc.
Prevenir la anemia en los bebés
La manera más sencilla de prevenir la anemia en los bebés es a través de una alimentación equilibrada.
La lactancia materna durante los primeros seis meses de vida es fundamental, para ello la madre debe disponer de todos los nutrientes necesarios, pero el hierro suele escasear también en la madre después de un largo embarazo y de un parto con la lógica pérdida de sangre. Por ello, muchas veces son ellas mismas quienes tienen que cuidarse enriqueciendo su dieta con algún tipo de complemento alimenticio destinado a aportar hierro al organismo como el Floradix, y por supuesto, una alimentación basada en verduras (pimiento, coles de Bruselas, repollo blanco), carnes rojas (roja 1ó 2 veces a la semana), legumbres (lentejas o las judías secas), productos integrales, etc.
A partir de los 6 meses los expertos aconsejan complementar la leche materna con leche de fórmula, pero siempre es necesario que hables con el pediatra del pequeño.